miércoles, 11 de junio de 2008

PREDICCIONES PARA EL 2030


Aquí muestro algunas de las predicciones en las cuales destaca el uso de Internet como herramienta principal para realizar la mayoría de las labores a las cuales estamos acostumbrados:

PREDICCIONES PARA EL 2030

Los vehículos empezarán a guiarse ellos solos con señal vía satélite y la educación secundaria sólo necesitará de la mitad o menos de la asistencia presencialContinuamos con la exposición de algunos de los aspectos revelados en los informes del Foro “Young Global Leaders” y el escritor Ray Hammond, que retratan a la Humanidad en el año 2030 de la siguiente forma:El papel que Internet jugará en nuestras vidas alcanzará niveles todavía más prácticos e impresionantes, gracias a las conexiones vía satélite y a la profusión de artefactos que se valdrán de su capacidad operativa.

Será posible acceder a la red gratuitamente las 24 horas del día desde cualquier lugar, tanto sea por nuestras “centrales móviles” (actualmente teléfonos celulares), como por relojes u otros dispositivos.

Portaremos un aparato que nos proporcionará, además de comunicación, un sistema de pago, entretenimiento, un localizador, alarma, radio, televisión, control para instrumentos y electrodomésticos a distancia, será portador de nuestro currículum, historial médico, e incluso indicará a los diabéticos al instante cuándo sus niveles de azúcar son anormales, entre otras cosas. Lo malo será que no sabremos vivir sin él.Los vehículos empezarán a guiarse ellos solos por las autopistas con la señal que reciban vía satélite y la educación secundaria sólo necesitará de la mitad de la asistencia presencial, quizás menos, gracias a las conexiones por Internet.Se multiplicarán las actividades de ocio a través del computador, tanto que los aparatos de televisión tendrán muchos más componentes informáticos y de conexión que el electrodoméstico tal como lo conocemos hoy en día. Llegará la televisión en tres dimensiones, aunque todavía no estará al alcance del público en general.

Las computadoras permitirán experimentar sensaciones táctiles y olfativas junto a las audiovisuales. Podremos percibir el olor del campo en una película desarrollada en el ambiente rural.Las casas consumirán menos energía y casi todos los dispositivos serán inalámbricos. Luces y otros aparatos se apagarán cuando no exista presencia humana, y viceversa. Los sistemas de seguridad formarán parte de los presupuestos del hogar en mayor medida.Muchos profesionales podrán trabajar desde casa a través de Internet.

Las empresas se adaptarán a ello, porque les saldrá más barato pagar por productividad que tener a esos trabajadores en sus sedes.La robótica dará pasos de gigante, hasta el punto que empezará a sustituir funciones y emociones humanas, por lo que se cuestionará su conveniencia e incluso su moralidad.

Los sociólogos que analizan la prospectiva se preguntan si estaremos listos para esta evolución.Ustedes ¿que opinan?, ¿será que en realidad se logren todos estos grandes cambios?


Comercio electrónico en Latinoamérica comienza a florecer

A menudo muchas compañías pasan por alto a Latinoamérica cuando se trata de innovación tecnológica o las últimas tendencias web. Es por esta razón que nos da mucho gusto saber que el mercado está madurando rápidamente y que aquellos que ‘creyeron’ en el, finalmente están comenzando a cosechar los frutos. Un buen ejemplo de esto es MercadoLibre.com, un lugar en línea para comprar y vender artículos parecido a eBay.

Aunque esta compañía atravesó por tiempos difíciles durante sus primeros años, MercadoLibre logró $52 millones en ingresos durante el 2006, y un impresionante crecimiento a $85 millones durante el año pasado.

Un crecimiento del 63.5% de un año a otro es impresionante bajo cualquier estándar, pero más importante refleja el estado actual del mercado latinoamericano. Hay mas latinos que nunca y muchos de ellos están dispuestos en participar en el comercio electrónico de una manera u otra. Esperemos que esta tendencia continúe en los años venideros.


Las compras del futuro

Históricamente, por comercio se ha entendido la negociación realizada comprando y vendiendo o permutando géneros o mercancías. Sin embargo, esta denominación ha cambiado con el auge de Internet. Este fenómeno ha provocado que la compraventa de productos y servicios tenga lugar, cada vez más, a larga distancia y desde cualquier lugar del mundo, dando lugar a la aparición de un nuevo concepto: el comercio electrónico o e-commerce.

El comercio electrónico es la capacidad de comprar y vender productos y servicios a través de Internet. Esto incluye la exposición online de bienes y servicios, peticiones, facturaciones, servicio al cliente y todo tipo de pagos y transacciones. Hoy día existen en el mundo más de 70 millones de sites (lugares) en la Red, con 700 millones de usuarios. Esta cifra da una idea del brillante escenario que se presenta a esta modalidad de negocio en las próximas décadas.
Un hecho que ilustra con claridad el desarrollo del e-commerce es el descenso de las operaciones bancarias por ventanilla que están experimentando grandes entidades financieras.

En algunas de ellas, como Santander, Banco Popular o Bankinter, los canales alternativos copan ya más de la mitad de las transacciones. Los sistemas de banca a distancia están asumiendo las funciones tradicionales de las sucursales, entre las que se incluyen los pagos y cobros directos.
El Observatorio Español de Internet, iniciativa nacida en 2002 y que se ha convertido en un referente en nuestro país en materia de observación, análisis e investigación en todo lo relativo a la fenomenología online, destaca que sólo en la época navideña, cerca de medio millón de ciudadanos acuden a Internet para realizar sus compras, lo que supone un gasto superior a los 280 millones de euros en ellas.

Las compras a través de este canal tienen lugar de manera muy concentrada, y precisamente la mitad de ellas se llevan a cabo en el periodo que comprenden las navidades. Sin embargo, la generalización del uso de Internet y la comodidad del medio prevén un futuro próspero para todos aquellos establecimientos que realizan su actividad comercial en la dimensión más virtual de las compras, en cualquier época del año.

En lo que se refiere al cliente, el ciber-comprador español es cada vez más activo en la Red. El mencionado Observatorio estima que un 50% de las compras online corresponde a pequeñas adquisiciones por un importe aproximado de entre 60 y 70 euros por persona; la mitad restante, con un precio notablemente más elevado, que oscila entre los 600 y los 1.800 euros, suele componerse de productos informáticos, ordenadores portátiles y paquetes vacacionales.

Si bien el trabajo administrativo y las demoras conectando online a los distribuidores y proveedores son una ventaja sustancial con respecto a la compra convencional, el e-commerce va a permitir también incrementar la capacidad de respuesta ante el cliente y reducir los costes de mantenimiento de inventario. Asimismo, las relaciones financieras con clientes y proveedores se optimizan mediante sistemas de pago y facturación a través de la Red. Éstas son sólo algunos de los puntos fuertes a potenciar, derivados de las transacciones comerciales en la Red.

La relación comercial con el cliente y proveedor es la semilla para un progreso continuo del negocio, para la maximización de la actividad comercial y, consecuentemente, de la rentabilidad empresarial. Existen iniciativas destacables por su capacidad para proporcionar todos los servicios y soluciones necesarios para la implementación de la solución de comercio electrónico que el cliente necesita. Así, en nuestro país están comenzando a gestarse proyectos empresariales favorables al fomento y desarrollo del e-commerce, por la parte que al comprador respecta, a través de la colaboración con compañías cuyos portales tienen un tráfico importante, fomentan el número de visitas, compras, búsquedas y registros.